Artículos etiquetados ‘analizar competencias’
Etapas del aprendizaje
miércoles, 13 mayo, 2009
Las etapas del aprendizaje para alcanzar una capacidad destacada son cuatro: incompetencia inconsciente, incompetencia consciente, competencia consciente y competencia inconsciente.
La incompetencia inconsciente es cuando ni siquiera conocemos la existencia de algo ni, consecuentemente, cómo funciona. Este puede ser el caso de un niño de siete años que no conoce la existencia del correo electrónico o no ha percibido la existencia del cambio de marchas del coche cuando sus padres lo llevan de viaje.
La incompetencia consciente ocurre cuando la persona se da cuenta de que ese algo existe, aunque no sabe muy bien para qué sirve, ni llegue a entender la explicación que le dan. Puede ser el caso del niño que pregunta por la utilidad del correo electrónico o para qué sirve esa palanca que mueven constantemente sus padres en el coche cuando conducen.
La competencia consciente es el momento cuando, después de haber recibido las instrucciones, nos ponemos manos a la obra de forma reflexiva, pensando cada paso que tenemos que dar, aunque a veces nos equivoquemos y nos salga mal. Es lo que ocurre la primera vez que nos montamos en el coche y lo queremos poner en movimiento, tenemos que pensar cuál es la siguiente acción a realizar; o cuando enviamos un correo electrónico por primera vez, algunos nos pueden ser devueltos.
La competencia inconsciente es el momento en el que la persona alcanza la destreza de esa competencia o habilidad. Es cuando algo nos sale de manera automática, sin pensar. Cuando hacemos un recorrido en coche ya no pensamos qué marcha meter, o cuándo cambiarla, es algo automático. Somos capaces de clasificar los mensajes recibidos en nuestra cuenta de correo electrónico en carpetas, recibiendo y enviando decenas de mensajes al día.
Las personas alcanzan una destreza en sus habilidades interpersonales siguiendo esta misma secuencia, si bien el tiempo que cada persona requiere para superar las distintas etapas dependerá de sus capacidades, de su grado de motivación y de su autoestima, elementos estos con los que ayuda un coach para minimizar el tiempo de aprendizaje total.
Coaching turístico
jueves, 4 septiembre, 2008
Estaba leyendo el blog de mi amigo Juan Otero, con quien tuve el placer de colaborar en temas relacionados con el turismo rural hace unos años, cuando observé que una de sus categorías era «Coaching Turístico«. Según Juan «… a través del Coaching Turístico, veremos las habilidades a desarrollar como empresario de turismo, cuáles son mejorables y cuáles desechables, e involucraremos este way of life en las personas que consumen este producto.»
Como coach, y como experto en temas relacionados con el turismo rural, no dudé ni un minuto en seguir leyendo al respecto y en preparar este primer artículo sobre este tema tan interesante que es el «Coaching Turístico«.
Las personas que hayan seguido mi blog podrán tener una idea más clara sobre el coaching, lo que es, las influencias que ha tenido, su metodología, las tendencias de futuro pero ¿cómo puede ayudarnos en nuestro trabajo? ¿Cómo puede ayudar a los alojamientos turísticos?
El dueño o director de un alojamiento turístico necesita conocer al cliente antes de que éste entre por la puerta principal de su negocio. El coaching desarrolla la habilidad de saber formular preguntas abiertas dedicadas a explorar la realidad y que comienzan por los términos: Qué, Cuándo, Dónde, Quién y Cuánto.
El sector turístico se está profesionalizando cada vez más. El coaching permite desarrollar capacidades individuales y habilidades en los equipos a través de la alineación de los objetivos y la elaboración de planes de acción.
Los directores de los alojamientos turísticos quieren conseguir equipos de alto rendimiento en cualquier situación de mercado. La metodología utilizada en el coaching permite:
- establecer objetivos específicos, medibles, alcanzables y realistas que impliquen un reto a nivel del equipo y de cada uno de sus miembros;
- definir claramente un plan de acción para conseguir los objetivos (captación, venta, fidelización, etc.) a nivel individual y con fechas perfectamente definidas;
- analizar las competencias de cada miembro del equipo y ver qué soporte o formación necesita para conseguir su objetivo, al tiempo que se involucra durante todo el proceso para asegurar que la persona continúa por el camino marcado o poder corregir las desviaciones producidas en su rumbo hacia la meta;
- mejorar la gestión del tiempo en sus empleados para que puedan planificar y organizar su tiempo y así trabajar de forma proactiva.
Los directores de los alojamientos también buscan minimizar la tasa de rotación de sus empleados. El coaching puede ayudar:
- utilizando técnicas como el «Feedback 360», donde cada individuo logra, dentro de la empresa, manejar su propio desarrollo profesional, y que a su vez éste coincida y beneficie el logro de los objetivos de la empresa u organización en la que se desempeña;
- mejorando las habilidades de los directivos para reconocer los éxitos, las aportaciones y las ideas de mejora propuestas, cuidando así la motivación de todos los miembros del equipo.