Artículos etiquetados ‘brand coaching’
Imagen distorsionada
domingo, 7 noviembre, 2010
La necesidad de las personas por desarrollar su imagen personal ha hecho que el brand coaching creciera de forma notable en nuestro país durante los últimos años. La importancia de tener una imagen coherente e intencionada es percibida por las personas que nos rodean como algo positivo, pero debe estar reforzada en todos los aspectos, al tiempo que debe ser congruente hasta el más mínimo detalle. Esta lógica puede ser la que en algunas ocasiones nos asfixie de tal forma que nos impida conseguir aquello que deseamos, desde ganar más dinero a encontrar una pareja.
Las personas vamos creando nuestra propia imagen desde el momento en el que tenemos uso de razón, bien porque queremos agradar a nuestros padres, bien porque queremos pertenecer a un grupo determinado, o por cualquier otra razón que entendemos puede ser beneficiosa para nosotros. De esta forma las personas vamos desarrollando una imagen con la que nos sentimos cómodos y a gusto. Una imagen que nos puede dar una sensación de poder, de protección, de autoestima o de equilibrio. Una imagen que, al fin y al cabo, muestra al mundo nuestra propia identidad.
Todo parece ir bien hasta el día en el que la persona toma consciencia de que la imagen que se ha creado es una carga de la que debe desprenderse si quiere conseguir los objetivos que se ha marcado a nivel personal o profesional. Es en esta primera etapa del aprendizaje cuando la persona comienza a cuestionarse, por ejemplo, si el ser perfeccionista la aporta algún valor añadido a su trabajo o tan sólo es un escollo que la impide ser más productiva y la acerca un poco más a ser despedida. O tal vez se pueda cuestionar si el dar una imagen de persona tímida la aporta algo, como estar protegida de los extraños, o es sólo un obstáculo para conseguir la pareja que busca.
Es la contradicción entre el ser y el querer la que genera desesperación y, al no conseguir lo que quiero, frustración. Esta lucha de poder se puede mantener eternamente mientras una de las partes sea más fuerte que la otra, mientras la persona no vea la necesidad de un cambio personal que la saque de ese atolladero en el que lleva inmersa durante tanto tiempo y que lo único que consigue es protegerla de ser ella misma, de ser feliz.
Nuestra identidad se muestra a los demás a través de nuestra imagen personal, por eso es tan importante ser coherentes con ella, porque nuestras acciones reflejan nuestra identidad personal. No somos lo que decimos, sino lo que hacemos. Y aquí está el gran enfrentamiento personal, en romper los hábitos labrados en piedra con el paso de los años y crear unos nuevos y diferentes que me permitan conseguir aquello que tanto anhelo.
Pero esto que parece tan sencillo inicialmente, cambiar los hábitos de conducta, puede ser algo más complicado de lo que suponíamos inicialmente debido, en gran medida, a que el cambiar un comportamiento lleva consigo el cambio de una creencia y, por ende, el cambio de mi identidad. Y puesto que somos personas sabias, nuestro yo interno nos autosabotea de forma sutil para evitar exponernos al peligro que acecha en el exterior.
Puede parecer mentira, pero las personas pueden cambiar sus comportamientos, así como identificar al autosaboteador que llevan dentro. Todo esto, unido a la identificación de objetivos personales y un plan de acción a la medida permitirá a la persona conseguir aquello que desea y ser una persona nueva, diferente a otras, más alegre y más feliz al conseguir una identidad más coherente con lo que ella quería ser.
Brand coaching
jueves, 13 noviembre, 2008
El Brand Coaching nace por la necesidad de las personas y las empresas de desarrollar, reforzar o definir su imagen personal y profesional a la hora de presentarse frente a los demás.
La imagen es una herramienta básica a la hora de destacar y diferenciarse de los competidores, pero el reto estriba en saber armonizar nuestra imagen con lo que realmente somos. Por ello, una imagen definida, coherente e intencionada es percibida por los clientes de forma positiva, mientras que si no hay coherencia en todo nuestro ser la gente que nos rodea lo intuye. Ya sea para una relación profesional o personal, la imagen debe estar reforzada en todos los aspectos, al tiempo que debe ser coherente hasta el más mínimo detalle.
El reto está en saber cuál es la imagen que queremos mostrar a la gente que nos rodea, a nuestros clientes, y es en este punto donde las herramientas del coaching son esenciales para ayudarnos a identificar lo que realmente tenemos en nuestra mente pero no somos capaces de expresarlo por miedo al qué dirán, a parecer frívolos, o cualquier otra creencia que no permite que mostremos cómo somos realmente.
Una vez tenemos claro lo que queremos mostrar al resto del mundo, el diseño gráfico y la asesoría de imagen nos ayudan a renovar el concepto que la gente tiene sobre uno mismo o nuestra empresa. Incluso cuando estamos comenzando de cero nos puede ayudar a iniciar nuestra andadura con una imagen impactante que desprenda confianza a nuestros futuros clientes.
El brand coaching es lo que estabas esperando desde hace tanto tiempo para renovar tu imagen frente a las personas que tanto te interesan.